jueves, 16 de julio de 2009

Que te acaricie yo, tus pechos, ave...

Que te acaricie yo, tus pechos, ave,
como rezar las cuentas de un Rosario,
y que mi amor, badajo y campanario,
te lo repique yo, que yo te clave.

Que sean mis manos, de tus muslos, llave.
Tu Rosa, de mis dedos, relicario,
y en su fronda la lengua de un canario
con mi lengua, la sal, que yo te lave.

Nada más eso pido, quiero, ruego.
A eso me dedico y a adorarte
a quererte, y a eso me consagro.

Y te juro, las manos sobre el fuego,
que volveré otra vez a codiciarte
cada vez que cumplas el milagro.

2 comentarios:

Jose Manuel (zoz) dijo...

Es imposible describir con palabras el sentimiento que provocas,solo puedes verlo y sentirlo, lo sabes bien. Y esa caricia a tus pechos, recorriendo con mi ser toda su plenitud hasta alcanzar la cima y encender el fuego de tu pasion, marcado por su dureza y altivez, hasta culminar mas alla del universo, de todos los universos, donde no existe tiempo ni espacio ni lugar ni nada, excepto un solo ser unico formado por la union y entrega incondicional de nuestros seres, en ese instante atemporal de explosion de sensaciones y extasis mutuo.
Besos pasion romantica.

Real Fenix dijo...

hermosas palabras y bella foto dan ganas sin duda de seguir conociendo dicha piel que rodea ese pecho...